Protector solar para Invierno
Protector solar para Invierno

Aunque se acabe el verano, ¡no guardes tu protector solar!

El verano ha terminado y es hora de guardar los sombreros, la crema solar y las toallas de playa, pero no te engañes pensando que eso significa que debas guardar también tu protector solar.

La verdad es que, aunque no estés expuesto todo el día al sol como en verano, el cáncer de piel sigue ahí acechando. 

Incluso si sólo te expones al sol unos minutos durante el trayecto al trabajo o cuando sacas la basura en casa, esos pocos minutos son suficientes para que la radiación ultravioleta (UV) cause daños suficientes que pueden desencadenar el melanoma más adelante en la piel.

Por eso, la protección solar es importante todo el año, no sólo en verano. Si bien es cierto que la radiación UV es más intensa en verano, esto no significa que deba dejar de utilizar la protección solar cuando bajan las temperaturas. De hecho, la radiación UV sigue siendo perjudicial para la piel durante todo el año.

Especialmente en invierno, mucha gente tiende a olvidarse de incluir en su rutina diaria la protección solar, y confía en los gorros y bufandas como protección contra el frío. 

Aunque estas cosas pueden ayudar a reducir la exposición a la radiación UV, no son tan eficaces como la protección solar y no protegen las zonas desnudas de la cara ni otras zonas de piel fina como las manos o las orejas.

Si realmente quieres estar a salvo de los daños causados por el sol durante los meses más fríos del año, recuerda: ¡Usa siempre protección solar!

La Fundación del Cáncer de Piel calcula que más de 5 millones de personas padecen cáncer de piel cada año. Por lo que, si quieres protegerte de estos riesgos, es importante que utilices diariamente la protección solar y la apliques cada dos horas para proteger tu piel al máximo de cualquier tipo de efecto nocivo de la radiación.

Prevenir los daños en la piel causados por la radiación UV puede ayudar a evitar que se produzcan estas enfermedades o que se extiendan a otras partes del cuerpo.

La protección solar debe usarse todos los días durante todo el año, independientemente de si se toma el sol o no, porque incluso cuando estamos en el interior podemos recibir cierta cantidad de radiación UVA y UVB a través de las ventanas.

Los rayos UVB pueden causar quemaduras solares en nuestra piel, mientras que los rayos UVA provocan envejecimiento prematuro, arrugas, manchas marrones en la cara, manchas en las manos y los brazos, problemas oculares, etc. 

¡Cuídate después del verano!

Y sí, sabemos que el final del verano puede ser agridulce, lo es para todos, pero no es demasiado tarde para disfrutar de un último fin de semana en la playa o la piscina. Así que no olvides la protección solar , sin duda es la mejor opción para mantener tu piel sana, con un aspecto joven y con una seguridad del 99% de no padecer cáncer de piel.

Y si sufrir o no cáncer de piel aún no es un motivo de suficiente peso para utilizar la protección solar cada día, recuerda los demás efectos que puede causar la radiación en tu piel como el envejecimiento prematuro y las manchas… 

Actualmente, en el mercado tienes infinidad de protectores solares para elegir el que mejor se adapte tanto a tus necesidades como a tus gustos: más o menos ligera, con o sin color, con efecto mate, textura gel… ¡Así que cero excusas y corre a por tu protector solar si es que aún no te queda del verano!

Y recuerda que aunque  el verano haya terminado, no significa que debamos dejar de proteger y mimar nuestra piel. Sigue nuestros consejos y tu piel se mantendrá con un aspecto joven y saludable durante muchos más años.

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